Aún queda tiempo

 

Seis puntos son la distancia entre el tercer clasificado, Ademar Leon, y el sexto, Ciudad Encantada. Si lo traducimos a partidos, tres, cuando restan siete para finalizar el campeonato. Sin embargo, si cogemos la referencia del cuarto (Cuatro Rayas Valladolid), los espacios se reducen a cuatro puntos y dos partidos. Diferencias ajustadas cuya dilatación en el tiempo ha de decidir los envites próximos. ¿Qué perspectivas tiene al respecto al Caja 3? Miremos esta vez al calendario para hacer cálculos.

En principio, en lo que respecta a los naranjas, cinco puntos con doce en juego hacen que, salvo debacle, Ademar quede muy lejos de nuestras garras y Torrevieja demasiado atrás como para superarnos. Asi, al Caja 3 le restan en casa Guadalajara, Anaitasuna y Valladolid mientras que las visitas a rendir son Puerto Sagunto, Atlético de Madrid, Amaya Sport y Huesca. Por otro lado, Cuenca espera en casa al Atlético, Barcelona, Torrevieja y Anaitasuna y coge las maletas para ir a Granollers, León y Logroño. Por último, Valladolid, aparta de tener que pasar por el Felipe, ha concertado cita en Logroño y Puerto Sagunto para vérselas en Huerta del Rey con Torrevieja, Anaitasuna, Guadalajara y Amaya Sport.

¿Qué podemos sacar en claro de este tinglado? En primer lugar, si nos decidimos a mirar hacia el cuarto puesto, parece complicado asolar a un Cuatro Rayas Valladolid que, pese a su escaldada salida del derbi con Ademar, goza de tres puntos de ventaja, un calendario a priori más accesible y un estado de forma saludable, como se ha visto a domicilio contra esos equipos de clase media o incluso baja que normalmente marcan el destino más de lo que creemos. Es la cara un poco más amable de una eliminación prematura de Europa. Por supuesto, tienen que pasar por aquí y sería tan bonito como importante llegar a ese partido a rebufo de los castellanos, pero vayamos paso a paso, que saldremos ganando.

De esta forma, si la prioridad es la defensa a sangre y fuego del billete europeo a través de la quinta plaza, Ciudad Encantada se eleva a un solo punto nuestro. En principio, son los que tienen el calendario más dificultoso ya que todavía no ha jugado con los tres primeros, y a dos de ellos, Barcelona y Atlético, los tiene como local. Siempre andamos diciendo que los conquenses tienen que flojear en un momento dado ante las bajas que ha sufrido de hombres capitales. Aún estamos esperando la agonía y sería más realista confiar en que nuestros posibles fallos no den un aire traicionero a los que acechan.

Por último, convendría una concentración absoluta de cara a este sábado porque Anaitasuna ya demostró hace unos meses que es un equipo que no regala nada en base a una defensa que chirriante en su intensidad y su capacidad de abrirse, secundada por un portero del que es suficiente con repasar la hemeroteca para darse cuenta de que allá por Noviembre se hizo un hueco en nuestros corazones. Ya tendremos tiempo de Flensburg. Mucho tiempo además. El Caja 3 no puede fallar en casa, incluyendo la durísima visita del Cuatro Rayas Valladolid y extremar las precauciones fuera ya que, dando por utópicos los dos puntos en Madrid, lo demás todo son trampas. Puerto Sagunto herido de muerte y algo más es de todo menos un colista. De un Amaya Sport ahogado en lo económico, cualquier previsión es inestable, como están demostrando y aquí en concreto hicieron función hace unos meses. Por último, no quiero ni pensar en lo que puede estar en juego en Huesca para ambos equipos en último partido de liga y lo cainita que puede derivar de esa situación.

Pero lo dicho, Anaitasuna. Para el sábado, que, si el calendario no engaña, es lo más próximo.

Fdo.: Álvaro Lombardo Sáenz.