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viernes, 24 de mayo de 2013

Sin noticias de Dios



Finaliza este sábado una temporada que en lo deportivo se cierra con nota alta, pues tras una primera vuelta regular y complicada en lo extradeportivo, la segunda vuelta ha sido de sobresaliente, ganando todo lo ganable mientras la competición ha estado viva. Tiempo tendremos de analizar lo estrictamente deportivo más adelante, pues preferiría centrar ahora el análisis en algunos aspectos que considero de interés.

Y lo primero es la situación en la que se encuentra el Club. ¿Si es que sabemos en qué situación está? Con el último partido de la Liga en puertas, un año más nos despedimos de nuestros jugadores sin saber quienes lo hacen para siempre. Dando por buena la noticia publicada por el Heraldo de AragónVictor Vigo marcha a Madrid junto con Alex y otro ex de la casa, Alberto Val. Sergio Ruiz ya nos comunico su baja del equipo, del resto poco sabemos. Rumores de todos los colores, certezas ninguna.

En lo económico, y desde la rocambolesca rueda de prensa en la que el Presidente anuncio la entrada en Concurso de Acreedores con una cifra de deuda variable, poco se ha sabido. La información es la que nos tiene acostumbrada el Club, “estamos trabajando”. Y no dudamos que lo estarán haciendo, pero si su intención era que el concurso finalizara pronto con un acuerdo que permitiera acudir a las ayudas a la Promoción al Deporte de la DGA todo parece indicar que no será así. Los plazos se agotan y hoy mismo veíamos publicada la lista de clubs que se beneficiarán de las ayudas. En esa lista falta el Balonmano Aragón por su actual situación concursal lo cual supone un nubarrón más en el horizonte. Sin la aportación primordial del patrocinio institucional el futuro es algo más que incierto.

La situación fuera del Príncipe Felipe es la que es, y los patrocinadores menores (pero igual de importantes) van desapareciendo de las camisetas del equipo y de la grada en la misma proporción que lo hacen los aficionados. Es un hecho que las gradas del Pabellón se han ido despoblando año a año mientras el Club vivía de espaldas a los medios. La animadversión a la prensa que ha demostrado tener el Presidente del Balonmano Aragón ha ido mermando su presencia en los medios desde su llegada a la dirección del mismo, y así resulta más complicado atraer abonados y patrocinadores. Además la crítica, por constructiva que pudiera ser, siempre ha sido considerada como un ataque al Club, y aquel que osara señalar el más mínimo defecto señalado como apestado.

Nadie en su sano juicio puede pedir a día de hoy una plantilla del coste de las que tuvimos años atrás, pero no es mucho pedir que la directiva informe a sus abonados, y sobre todo jugadores, cuál es la situación,  si el próximo año deberán defender el equipo solo jugadores locales, o si existe patrocinador principal, o si se cuenta o no con jugadores como Asier Antonio, Carlos Molina, Javi García, etc.. Igual es pedir demasiado. Igual no.





Fdo.: Espíritu de Magdeburgo.  

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Tranquilo, hombre, tranquilo. Si se plantea un concurso con la intención de pagar el 100% de la deuda (creo que debe ser el primero en la historia), a lo mejor es que tampoco se necesita la subvención de la DGA.

No perdamos la esperanza!!!

Anónimo dijo...

En el real Zaragoza está de presi Agapito porque ellos eligieron antes.

Hoy, último partido de una buena temporada, ni una triste reseña en el Heraldo. que se vayan a la m...

Gracias de todo corazón a los jugadores que son los unicos con verguenza.

Nachobal dijo...

Bravo por el artículo. Penoso y lamentable lo de la política, desde luego si están pensando en ganar nuestro voto ni de un lado ni de otro...lo están bordando.

Se dejó tirado al muñeco agapito y se ha dejado tirado deambulando y sostenido por 2 gatos alguna gente trabajando mucho y un grupo de jugadores y aficionados de chapeau.

Un abrazo a todos, y desde luego esto lo vamos a salvar entre todos. Manifestándolo hoy mismo y acudiendo.

Desde el club se debería haber instado algo más crudo buscando que la gente acuidiera en rescate del club al pabellón.