Parece mentira pero Huesca, poco a poco va tomando
protagonismo en la élite nacional del deportes español. Si primero fue la SD. Huesca con su ascenso a Segunda División y más tarde, el Lobe Huesca conseguía ascender a la Liga LEB Oro, el año pasado, el BM. Huesca daba el paso más importante
de su historia y conseguía ascender a la mejor liga de balonmano del mundo que
no es otra que la ASOBAL. Este
ascenso no sólo suponía que aquí iban a venir los mejores equipos del mundo
como el FC. Barcelona, el Atlético de Madrid (antiguo Ciudad Real), el Amaya San Antonio de Pamplona
o el BM. Valladolid, entrenado por
mi admiradísimo Juan Carlos Pastor, sino que también, el BM. Huesca se enfrentaría al Caja
3 Aragón lo que supone un derbi
entre equipos aragoneses que nunca se ha dado en la primera categoría del
balonmano nacional.
Estos días cuando paseas por Huesca, puedes ver como se palpa el
ambiente del derbi que se va a disputar. Evidentemente no es lo mismo que
cuando se enfrentaron, hace un par de años, la SD Huesca y el Real Zaragoza,
debido a que, como todo el mundo sabe, el fútbol sigue teniendo un espacio
predominante dentro de la sociedad: sin embargo, la gente habla de que este
derbi se disputa en la máxima categoría, en la primera división de la mejor
liga del mundo, como he mencionado anteriormente.
Los aficionados al balonmano en
la ciudad oscense están muy entusiasmado por dar buena imagen y por intentar
ganar el derbi, aunque saben que es muy complicado por la entidad del rival.
Aquí se sabe que el Caja 3 Aragón ha
ido creciendo con el paso de los años y que incluso ha disputado una final
europea, cosa que, con el paso de los años, es a lo que aspirara el BM Huesca.
Este partido, derbi aparte, es
muy importante para el BM. Huesca
debido a que la última derrota en casa contra el Guadalajara nos ha dejado a un
punto del descenso: sin embargo, se cree que este último partido de Liga de la
primera vuelta, llega en un momento en que la motivación puede jugar un papel
fundamental en el desarrollo del partido. Por eso, al pabellón siglo XXI de la capital aragonesa,
llegaran muchos aficionados que apoyaran sin descanso, durante los sesenta
minutos del partido, al BM. Huesca
con el objetivo de que nuestro equipo sea el que se lleve los dos puntos en el
día de mañana.
Una vez terminado el partido,
desde Huesca se deseará, como se ha hecho siempre, que el Caja 3 Aragón vuelva a ganar todos sus partidos y lleve el nombre
de Aragón por toda España con firmeza y garra, igual que
lo lleva el BM Huesca.
Fdo.: José Pablo Rosera (Desde Huesca)
“Aragón -esto es, los
aragoneses- sabe que posee una entidad peculiar, incluso enteriza, pero no sabe
bien en qué consiste ni cómo definirla para asumirla, rechazarla remozarla,
criticarla o actualizarla, para moldearla a su gusto según se mueve el compás
del tiempo. Y esto puede ser fuente de una gran indefinición e inseguridad
colectiva.”
Así rezaba, con esta
contundencia, la aseveración de Guillermo
Fatás. Seguramente, los motivos que obedecen a las denominadas “razones del
corazón” escapan al uso del raciocinio. No esté el espacio para hablar de
historiografía ni de ideas políticas más o menos avezadas; éste es un espacio
de reunión en el que suelen acudir aquellos que siguen y disfrutan, también
sufren, de las andanzas del equipo más representativo de la ciudad de Zaragoza en el mundillo del balonmano.
Este espacio, esta casa común, hoy está de fiesta, como cuándo en la casa del
humilde regresa ese familiar que tuvo que ganarse las habichuelas en algún
lugar lejano. Hoy vienen a celebrar los buenos momentos, lo especial del día,
nuestros vecinos del Norte, fatos, oscenses, aragoneses como nosotros.
Debería valer como resumen lo
resonante de las palabras: El primer derbi en la máxima categoría nacional del
balonmano. Ibai Cano se muestra como
referencia, único jugador que ha vestido ambas elásticas en la élite. En sus
espaldas se condensa la hazaña: Del extinto Garbel a un CAI Balonmano
que creció para consolidarse entre los equipos de referencia a nivel nacional y
europeo para finalmente recalar en la aventura que se desarrollaba setenta
kilómetros más al Norte. La
primavera pasada, con la agonía de ley, se certificaban las declaraciones
hechas meses anteriores por Juan de Dios
Román. Huesca olía a ASOBAL. Huesca era ASOBAL. Desde
el Ebro lo mirábamos con alegría (el
presente casi choca con el techo cuando Julio hacia un penalty paroxismo puro)
y empezábamos a pensar, nunca a darnos a cuenta, de lo bonito que iba a ser
saludarnos en la cima, cada uno con sus proyectos, sus metas y sus avatares,
pero arriba del todo a fin de cuentas.
Los malentendidos, lo resabiado
que hace a uno el país del polvo, la niebla, el viento y el sol como cantaba Ixo Rai!, han conllevado confusiones y
creencias absurdas muchas veces malintencionadas. De la misma manera que no
podemos bajar los brazos por darlo todo por perdido frente a fuerzas
superiores, llamadas colonialismo, irredentismo o abandono, debemos creer que
en nosotros está la capacidad de variar lo que no nos gusta. Que,
inevitablemente, hemos de asumir errores, menosprecios o envidias para
construir un futuro no basado en el agravio sino en él mismo, en las ganas de
convivir y de dotar de un sentido de acogida la palabra Aragón. Uno de esos sentidos puede ser el balonmano. Así, los
vecinos más que hijos pródigos será compañeros en lo bueno y en lo que no lo es
tanto para acabar entendiendo que, como en casa, en ningún lado.
Eso si, en lo estrictamente
deportivo, necesitamos los dos puntos. Aquí nadie conoce a nadie. Sólo son
sesenta minutos, sólo.
Fdo.: Álvaro Lombardo Sáenz
1 comentario:
Buen trabajo de los dos. Esperemos disfrutar hoy de un buen partido. Una pena que no se puedan llevar los dos equipos los dos puntos, que buena falta nos hacen. Pero.
Lo dicho. Buen trabajo.
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