Rugby en sala

Antes del pormenorizado análisis de mi otro yo, me gustaría incidir en el tema del arbitraje y la diferencia que supone jugar en Alemania o hacerlo en España, el concepteo deportivo cambia notablemente, pese a utilizarse el mismo reglamento la aplicación del mismo es netamente dispar, la prohibición de agarrar se sustituye por la obligación de agarrar y las acciones peligrosas para la integridad física de los jugadores deben ser realizadas con pistola o incluso con soplete. También resulta notablemente curioso ver como el público acepta con normalidad lo que para nosotros es impensable e incluso lo jalean, en resumidas cuantas estamos hablando de otro deporte.

¿Puede considerarse el arbitraje una excusa para haber perdido de siete?, depende de cómo se mire o de cómo se interprete, en mi opinión es cierto que influyo en el resultado permitiendo un partido físico y violento, gente como Daniel Kubes en este tipo de partidos se mueve como tiburón en el agua, por lo cual con un arbitraje que hubiera frenado todo ese tipo de acciones habría supuesto un resultado netamente distinto. Pero conociendo como se juega en Alemania y quién manda en la EHF no es algo sorprendente ni tampoco inesperado, Al norte de los Alpes la comida es deleznable y el balonmano es rugby, o te preparas para la guerra con jamón envasado al vacío o solo te espera sufrir y lamerte las heridas. Pero la cuestión clave es determinar si nosotros estamos capacitados para elevar nuestro nivel físico en Alemania o simplemente para aguantar los golpes, posiblemente sea mas lo segundo, pero eso no es excusa para que su Pivote Sebastián Preiss se monte un pisito en los seis metros o que el y los extremos circulen por dicha línea como si fuera la Z-40, en fin de poco puede servirnos ahora lamentarnos únicamente podemos aprender para el siguiente e intentar no desmoronarnos por los golpes la próxima vez, la primera batalla se ha perdido con un brecha de 7 goles de diferencia, pero aún queda el segundo acto en Zaragoza.

La receta de la remontada empieza por algo sin lo cual no hay nada que hacer, debemos conseguir que los colegiados Franceses apliquen el reglamento como en España y no como en Alemania y para ello solo podemos hacer una cosa, la afición debe recoger el guante lanzado por los alemanes y presionar sin descanso cada contacto que realicen los maléficos Teutones, por parte del equipo debe elevarse su nivel físico desde el principio y a ser posible recibir a su jugador franquicia Michael “Mimi” Kraus con tarascadas desde el primer minuto, el resto es evidente jugar al balonmano, hacerlo bien y variado, solamente desde ahí podremos abrir la puerta de las semifinales e incluso de la final, remaremos todos juntos a por la CAIMANREMONTADA SEGUNDA PARTE “EL RETORNO DEL CAIMAN”.

Nota.- Daniel Kubes no es que sea lento y llegue tarde a los contactos, los fichan así de lentos para que siempre tengan que golpear zonas blandas o la cabeza. (Luego los alimentan con codillo, chukrut y patata hervida)

Fdo.: Donbeno73 (portero).- ganamos de 9 fácil.

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